* México, país “no libre” para prensa: Freedom House
* Panorama negro para el gremio: Judith Calderón y Sanjuana Martínez
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México, DF
Los periodistas en riesgo de México tendrán a partir de la tercera semana de septiembre un refugio especial en la capital del país, lugar donde podrán recibir atención especial quienes se sientan amenazados, perseguidos o sufran algún atentado.
El subsecretario de Gobierno del Distrito Federal, Juan José García Ochoa, anunció lo anterior durante su intervención en el Primer Encuentro Nacional de Periodistas Capacitadores en Autoprotección, que se desarrolló en esta ciudad a convocatoria de la Casa de los Derechos de Periodistas, con el apoyo de la fundación estadounidense Freedom House y el propio gobierno capitalino.
Ante 89 periodistas provenientes de 28 entidades del país, el funcionario destacó que esta acción es un compromiso de la administración capitalina con el gremio de los comunicadores.
En su intervención, la directora en México de Freedom House, Mariclaire Acosta, reiteró que hoy, México es el segundo lugar más peligroso en el mundo para el ejercicio periodístico. “México es un país no libre para la libertad de prensa”, condenó la representante de la organización internacional.
A su vez, la presidenta de la Casa de los Derechos de Periodistas, Judith Calderón Gómez, hizo un balance del “negro panorama” en materia de seguridad para el gremio: “en lo que va de 2012 fueron asesinados diez periodistas, la mitad de los crímenes ocurrieron en Veracruz y la situación es grave en Chihuahua, Guerrero, Morelos, Sonora, Tamaulipas y Nuevo León”, dijo.
“Lo más grave es que no existe una reacción contundente de los gobiernos federal y estatales que permita castigar a los culpables y terminar con a impunidad. Este silencio permite que se reproduzcan estos crímenes”, continuó.
Expuso que el último análisis de la asociación Artículo 19 habla de 72 comunicadores asesinados, 13 que continúan desparecidos, y 40 ataques a medios de comunicación durante el actual sexenio.
“El panorama en México para los periodistas es oscuro, tenebroso, después de tantas muertes de compañeros”, dijo a su vez la periodista Sanjuana Martínez, de La Jornada, quien hace unas semanas fue arrestada por orden de una juez implicada en una investigación periodística de la comunicadora.
Cuestionó la ausencia de la fiscal especial para la Atención de Delitos Cometidos contra Periodistas de la Procuraduría General de la República, Laura Angelina Borbolla Moreno, quien había confirmado su participación en el Encuentro, pues la dependencia que encabeza “no ha dado resultados y sí recibe presupuesto”, dijo.
A juicio de la comunicadora, “el gobierno de Felipe Calderón ha sido de los más ignominiosos en el tema de protección a periodistas”.
“Estamos cansados de ver cómo los asesinan, de trabajar con miedo, sobre todo en el norte, y es lamentable que el Estado no tome nota de lo que está ocurriendo; en algunos casos no se realizan las investigaciones adecuadas debido a que se señala que los periodistas fueron asesinados por cuestiones personales y no por su labor periodística”.
El Primer Encuentro Nacional de Periodistas Capacitadores en Autoprotección se realizó en la Ciudad de México el 23,24 y 25 de agosto, con el fin de fortalecer las capacidades de comunicadoras y comunicadores de todo el país para enfrentar los riesgos de agresiones y reducir la vulnerabilidad en la que desarrollan su trabajo.
El Encuentro consistió en una serie de conferencias, talleres y mesas redondas sobre temas como protocolos personales para evitar la violencia, leyes y normas existentes para el ejercicio periodístico, experiencias de investigación en periodismo y los distintos tipos de organización para la autodefensa, entre otros.
Las actividades, se desarrollaron jueves y viernes en el Salón de Usos Múltiples de la sede del gobierno capitalino.
La Casa de los Derechos de Periodistas es una asociación civil mexicana fundada en 2010 para prestar apoyo, asesoría, acompañamiento y otras acciones necesarias para proteger la integridad y los derechos de las y los periodistas, cuando se encuentren en riesgo por el ejercicio de su profesión.
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