viernes, 10 de julio de 2015

A cinco años de la desaparición del periodista Evaristo Ortega Zárate

¡Ni uno más! exigieron periodistas veracruzanos; dos años después, asesinarían a Regina Martínez.

Eliseo Tejeda Olmos
Xalapa, Veracruz

Evaristo Ortega y Miguel Ángel Márquez Yunes,
alcalde de Boca del Río, Veracruz.
Poco después del mediodía del lunes 20 de abril 2010, el periodista veracruzano Evaristo Ortega Zárate, director del semanario Espacio -impreso y en página web de noticias- informó a su hermana Irene en mensajes vía teléfono celular: "avísale a todos; nos llevan detenidos; nos llevan en patrulla a Veracruz".
Desde entonces, cinco años después, no se ha sabido nada de él. Este 10 de julio de 2015 Evaristo cumpliría 38 años.
En su momento fue el onceavo periodista desaparecido en México, cuando se desató una serie de agresiones en contra de los trabajadores de los medios de comunicación que hasta ahora no ha terminado, tan solo en Veracruz son ya trece los asesinados.
Las condiciones no han cambiado, como en el caso de Evaristo, cuya desaparición se atribuyó  a motivos diferentes al ejercicio de su trabajo periodístico porque aspiraba a ser presidente municipal de su pueblo natal, Colipa, a donde volvió después de trabajar un tiempo en Xalapa, capital del estado de Veracruz y en la que aprendió y ejerció el oficio periodístico.
El partido que lo iba a postular como su candidato, Acción Nacional, se desatendió del caso lo más rápidamente posible; fueron sus compañeros periodistas los que siete días después condenaron en la plazoleta Lerdo de Tejada, frente al palacio del gobierno estatal, su desaparición forzada y exigieron a las autoridades que trabajaran para que regresara sano y salvo con su familia, pero nada lograron en ese sentido.
Evaristo Ortega y la entonces diputada local
Irma Chedraui Obeso.
Una gran manta con su rostro y la leyenda Ni uno más fue el marco de la protesta y exigencia de los periodistas en Xalapa. La única respuesta que recibieron algunas reporteras fueron amenazas para que dejaran de participar en las protestas.
Imborrable para el gremio periodístico quedó la frase despectiva de la entonces presidenta de la Comisión Estatal de Derechos Humanos en Veracruz y exsecretaria del Gobierno del Estado, Nohemí Quirasco Hernández, la que preguntó a los reporteros ¿quién era?, no lo conocía como periodista.
Dos años después, en el mismo fatídico mes de abril, entre la noche del día 28 y la madrugada del domingo 29, fue asesinada en su casa del barrio de El Dique, la periodista Regina Martínez, pero ella se desempeñaba como corresponsal de la revista Proceso y antes lo fue de La Jornada, el crimen trascendió las fronteras de Veracruz y de México, al grado que en su memoria se puso su nombre a una calle de Oviedo, España.
Como los restantes casos de desaparición y asesinato de periodistas en México y Veracruz, el de Evaristo Ortega Záratez sigue sin solución e impune.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Y así se van a quedar. Contubernio Gobierno-Narco-Policía hace imposible aplicar justicia. Hasta ahora nadie ha dado paso a la venganza. Cuidado.